Sean misericordiosos como su Padre es misericordioso

Jesús
Mosaico de Jesús en una catedral en Estambúl, Turquía. Foto por Dianelos Georgoudis – Link

Libro de Daniel

Dn 9, 4-10
En aquellos días, imploré al Señor, mi Dios, y le hice esta confesión:

“Señor Dios, grande y temible, que guardas la alianza y el amor a los que te aman y observan tus mandamientos. Nosotros hemos pecado, hemos cometido iniquidades, hemos sido malos, nos hemos rebelado y nos hemos apartado de tus mandamientos y de tus normas. No hemos hecho caso a los profetas, tus siervos, que hablaban a nuestros reyes, a nuestros príncipes, a nuestros padres y a todo el pueblo.

Tuya es, Señor, la justicia, y nuestra la vergüenza en el rostro, que ahora soportan los hombres de Judá, los habitantes de Jerusalén y de todo Israel, próximos y lejanos, en todos los países donde tú los dispersaste, a causa de las infidelidades que cometieron contra ti.

Señor, la vergüenza es nuestra, de nuestros reyes, de nuestros príncipes y de nuestros padres, porque hemos pecado contra ti. De nuestro Dios, en cambio, es el tener misericordia y perdonar, aunque nos hemos rebelado contra Él, y al no seguir las leyes que Él nos había dado por medio de sus siervos, los profetas, no hemos obedecido su voz”.

Evangelio según San Lucas

Lc 6, 36-38
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:

“Sean misericordiosos, como su Padre es misericordioso. No juzguen y no serán juzgados; no condenen y no serán condenados; perdonen y serán perdonados.

Den y se les dará: recibirán una medida buena, bien sacudida, apretada y rebosante en los pliegues de su túnica. Porque con la misma medida con que midan, serán medidos”.

Published by

Oscar Editor

Oscar es el editor de NosRodea.com

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

This site uses Akismet to reduce spam. Learn how your comment data is processed.