Hoy es el Domingo de Resurrección, el dia en que Jesús ha vencido a la muerte. Ahora sà podemos decir que hay esperanza. Nuestro Señor nos presenta que la muerte no es el final, sino el comienzo. El pudo vencer al enemigo y, al mismo tiempo, con su muerte ha traido vida nueva y el perdón.
Los discÃpulos, los apostoles, ahora entiende todas las parábolas y enseñanzas. Ahora, finalmente, comprenden todo lo que les decÃa Jesús de su hora y lo que iba a suceder. Y ellos emprendieron sus caminos para comenzar a predicar el evangelio, la buena nueva.
Hoy no se celebra misa, sino que sólo tenemos liturgia de la palabra. Es una ceremonia de tres lecturas, incluyendo una completa descripción de la Pasión de Nuestro Señor.
El mensaje de hoy es mostrar cómo Jesús nos ama a cada uno, aunque seamos pecadores, pues Él sufrió su Pasión y muerte por los pecados de todos, para que la humanidad entera se salvara.
Hoy recibimos a Jesús en Jerusalen, con hojas de palma y las extendemos a su paso. Es el mismo recibimiento de los reyes.
Pero dentro de siete dias lo vamos a estar crucificando.
Jesús ha viajado por toda la región por un corto tiempo. Algunos dicen que sólo han sido unos cuantos meses, pero otros dicen que han sido tres años.
Y esta es la primera vez que entra a Jerusalen, la ciudad más grande de Judea, la capital del mundo judio.
Jesús ya tiene fama: muchos lo consideran un mago, otros un profeta, y otras más lo ven como un enemogo del status-quo, su llegada amenaza el estilo de vida de los sacerdotes y escribas quienes se creen los amos del pueblo.