Domingo de la Santísima Trinidad, 2021

Imagen de la Santísima Trinidad
Imágen de la Santísima Trinidad, por www.ldm.lt, Public Domain, Link

Cada vez que hacemos la Señal de la Cruz decimos: Gloria al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo. La enseñanza de la Iglesia siempre ha sido la misma: Un solo Dios, pero formado por tres personas o entidades.

Hoy hacemos dedicación de nuestro domingo a la Santísima Trinidad. Y el Evangelio de San Mateo nos dice:

En aquel tiempo, los once discípulos se fueron a Galilea y subieron al monte en que Jesús los había citado. Al ver a Jesús, se postraron, aunque algunos titubeaban.
Entonces Jesús se acercó a ellos y les dijo: “Me ha sido dado todo poder en el cielo y en la tierra. Vayan, pues, y enseñen a todas las naciones, bautizándolas en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, y enseñándolas a cumplir todo cuanto yo lo que les he mandado; y sepan que yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo”.

Domingo de la Santísima Trinidad 2020

Santísima Trinidad
La Adoración a la Trinidad, por Albrecht Dürer. En medio, de arriba a abajo: El Espíritu Santo (la paloma), Dios Padre, y el Hijo, Jesucristo crucificado – _wGp9zTkz0OVqQ at Google Cultural Institute maximum zoom level, Public Domain, Link

Una semana depués del Domingo de Pentecostés, celebramos a la Santísima Trinidad, la cual es la dedicación a la doctrina de que sólo existe un Dios, pero que está formado por tres personas eternas e iguales: El Padre, el Hijo (Jesús) y el Espíritu Santo. Tres personas distintas, pero al mismo tiempo un mismo cuerpo y substancia.

Dice el Evangelio de San Juan de hoy:

“Tanto amó Dios al mundo, que le entregó a su Hijo único, para que todo el que crea en él no perezca, sino que tenga la vida eterna. Porque Dios no envió a su Hijo para condenar al mundo, sino que el mundo se salvara por Él. El que cree en Él no será condenado, pero el que no crea ya está condenado, por no haber creído en el Hijo único de Dios”.

 

Lecturas del Domingo: Junio 11, 2017 – Santísima Trinidad

Santisima Trinidad
Santísima Trinidad, por Szymon Czechowiczwww.ldm.lt, Public Domain, Link

Hoy es el domingo de la Santísima Trinidad, uno de los dogmas cristianos más controversiales.

Y es que, muchas sectas y religiones atacan al cristianismo –especialmente al catolicismo– diciendo que se está cometiendo un terrible pecado al adorar a “tres dioses“… ¡Nada más alejado de la realidad!

Es cierto que en toda la Biblia no se menciona la palabra trinidad, pero son muchos los lugares en la sagrada escritura que tenemos una referencia indirecta:

  • Primero, en el Libro del Génesis (Génesis 1-26), durante la narración de la Creación, escuchamos que Dios dice: “Dijo Dios: ‘Hagamos al Hombre a nuestra imagen y semejanza’“. En los párrafos previos escuchamos que Dios ordena la creación con verbos como: haya, júntense, sepárense, llénese, y produzca. Pero Dios dice “Hagamos” refiriéndose a varias personas.
  • Luego, Abraham recibirá a tres personas en su tienda, poniendo el rostro en el suelo y reconociendo en los tres a Dios.

San Agustín tiene un relato bien interesante con respecto a este misterio.

Así pues, por más complicado que parezca, los cristianos –principalmente nosotros los Católicos– reconocemos que Dios existe en tres personas al mismo tiempo: Dios Padre, Dios Hijo y Dios Espíritu Santo. Si lo quieres tratar de comprender con el básico razonamiento humanos, pues no tiene sentido, pero como hemos dicho constantemente en este sitio, tienes que tener la mente abierta y tratar de entender que el nuestro no es el razonamiento de Dios, pues éste va más allá del nuestra razón.

Entender, y aceptar, el misterio de la Santísima Trinidad es la base para aceptar a Jesús como Dios.

 

Lecturas del Domingo: Enero 1, 2017 – Día de Santa María, Madre de Dios

María, Madre de Dios
María, Madre de Dios

Hoy es el día de Santa María, Madre de Dios. El tema de María, de cómo concibió a Jesús, de su relación con José, y otros más, es uno de los más espinozos que se pueden tratar con los protestantes, nuestros hermanos separados.

Es tan triste pensar que en muchos templos, su imagen es destruída y hasta atacada con calumnias y bajezas.

Digan lo que digan, un hecho es cierto, claro, y real: María, fue Madre de Jesús. ¿No es eso suficiente para al menos tenerle el mínimo respeto? ¡Si no quieren venerarla, al menos respétenla!

Aquí les va un pensamiento medio complicado para este inicio de año:

Jesús existía desde el comienzo, así lo dice el Génesis. En el comienzo la luz ya existía, y la luz era Jesús, que junto con el Espíritu Santo y Dios forman la Santísima Trinidad. Ellos tres son uno sólo. Ellos tres son uno mismo.

Jesús nace, se convierte en hombre. Jesús es el Dios mismo. María es la Madre de Jesús… por lo tanto, María es la Madre de Dios… ¿no?

Lecturas del Domingo: Julio 17, 2016 – ¡Marta, Marta, Marta!

Martha and Mary
Jesús en la casa de Marta y María. By Johannes VermeerfwE2zem7WDcSlA at Google Cultural Institute maximum zoom level, Public Domain, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=21865869

Primero, el relato de Abraham

Abraham y los tres visitantesEn esta primera lectura escuchamos como Abraham recibe a tres visitantes. Él sabe que no se trata de personas cualquiera, y que él está en presencia divina.

Muchos estudios dicen que son ángeles. Sin embargo, Abraham hace algo que nos dejará en claro quiénes son:

“Al verlos, se dirigió a ellos rápidamente desde la puerta de la tienda, y postrándose en tierra les dijo: Señor mío, si he hallado gracia a tus ojos, te ruego que no pases junto a mí sin detenerte”.

Son tres personas, y él les llama “Señor mío”. Se trata de la Santísima Trinidad y Abraham lo sabe bien. De ellos recibirá una gran noticia: que su esposa Sara tendrá un niño el próximo año. Abraham y Sarah son viejos de 80 años. Sara escucha lo que sucede y se rie para sí, pensando en lo ridículo de esa profecía. El trio la amonesta diciéndole: “Nada es imposible para Dios“.

El relato de Marta y María

Este pasaje es hermoso e interesante. Jesús y todos los discípulos llegan a casa de María y Marta, dos hermanas que vivien juntas. Mientras el Señor predica la palabra, María se sienta a sus pies escuchándolo atentamente. Marta, por su parte, está ocupada sirviendo a los demás y en otros quehaceres de la casa. Llega un momento en que no aguanta más y le dice a Jesús: “Señor, ¿no te has dado cuenta de que mi hermana me ha dejado sola con todo el quehacer? Díle que me ayude”.

A veces, ¿no sientes como que se te deja todo a tí?, ¿no has pensado en ocasiones que es injusto cómo otros sólo se sientan a hacer otras tareas sencillas y tu estás todo ocupado(a)?

Jesús tiene la respuesta correcta: “Marta, Marta, muchas cosas te preocupan y te inquietan, siendo así que una sola es necesaria. María escogió la mejor parte y nadie se la quitará“.

No juzguemos a Marta. Alguien tiene que hacerse cargo del quehacer y del servicio. Y lo más importante: ella sí está poniendo atención, pero se ha sobrecargado de tareas y solita se está llenando de tensión y problemas.

¿Cómo sabemos que está poniendo atención? Más adelante, cuando el hermano de Marta y María, Lázaro, venga a escena, Marta le dirá a Jesús: “Tu eres resurrección y la vida“.

Sin duda, una lección bien aprendida.