Lecturas del Domingo: Agosto 6, 2017 – La Transfiguración de Jesús

La transfiguración de Jesús
La Transfiguración, por Carl Blochhttp://www.1st-art-gallery.com/Carl-Heinrich-Bloch/The-Transfiguration.html, Public Domain, Link

Las lecturas de hoy tienen mucha relación entre sí, pues nos hablan de la magnífica relación entre Jesús y su Padre.

Primero, Daniel nos habla de una visión que se repetirá más adelante en el Apocalipsis de Juan: Un “anciano de muchos siglos” (Dios) que tiene miles y miles de servidores (ángeles), y millones y millones que estaban a sus órdenes (la Iglesia, o sea todos los que creemos).

Luego, Daniel describe cómo viene una persona –alguien semejante a un hijo de hombre (Jesús en su condición humana)– entre las nubes y recibe del anciano la Soberanía, la Gloria, y el Reino.

Daniel termina su visión del Reino de Dios, y cómo el mismo Padre entrega todo el poder a Jesús, con estas palabras:

“Y todos los pueblos y naciones de todas las lenguas lo servían. Su poder nunca se acabará, porque es un poder eterno, y su reino jamás será destruido”.

Esta primera lectura nos dice que Dios entrega todo el poder a un hombre, sin mencionar su nombre. Y es que Daniel aún no conoce la historia de Jesús, pues su época es de aproximadamente 300 años antes, pero en sus relatos constantemente se mencionan profecías de su llegada.

Pedro nos recuerda de un encuentro especial con Jesús

Dice Pedro en la segunda lectura:

“Dios lo llenó [a Jesús] de gloria y honor, cuando la sublime voz del Padre resonó sobre Él diciendo ´Este es mi hijo amado en quien yo me complazco´. Y nosotros escuchamos esa voz, venida del cielo, mientras estabamos con el señor en el monte santo”.

Pedro habla del evento de la Transfiguración.

La Transfiguración de Jesús

En estos tiempos, es difícil imaginarnos la intensidad de este momento, especialmente cuando tenemos tanto CGI y efectos especiales en las películas de Hollywood que prácticamente ya no nos impresionan. Para poder tener todo en orden, hay que ponerlo en contexto:

“Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan, el hermano de éste, y los hizo subir a solas con Él a un monte elevado. Ahí se transfiguró en su presencia: su rostro se puso resplandeciente como el sol, y sus ropas se volvieron blancas como la nieve”.

Aquí, hablamos de un evento sobrenatural, en el cual se desafían todas las leyes naturales.

La resplandecencia nos habla de energía, la revelación de lo que en realidad somos y en Jesús lo cofirmamos.  Además, se abre un portal para dar paso a otros dos personajes muy importantes:

“De pronto aparecieron ante ellos Moisés y Elías, conversando con Jesús”.

Moisés representa la Ley, y Elías es el Profeta más importante para el pueblo Judío; así pues, los dos vienen a reafirmar la autoridad de Jesús, como diciendo que ellos, dos de las más importantes personas de la religión están a la par de Jesús.

El relato termina así:

“Una nube luminosa los cubrió. y de ella salió una voz que decía: Este es mi Hijo, muy amado, en quien tengo puestas mi complacencias; escúchenlo”.

Conclusión

Las tres lecturas nos han presentado a Jesús, a Dios y al gigantezco momento que Dios nombra a su Hijo como el Predilecto, el Soberano sobre todas las cosas. Tres épocas diferentes, tres relatos de gran contenido. Una sola verdad.

Lecturas del Domingo: Marzo 12, 2017 – La Transfiguración

La transfiguración de Jesús
La transfiguración del Señor por Alexander Andreyevich Ivanov, Public Domain.

Esta misma lectura estuvo presente en el Segundo Domingo de Cuaresma del año pasado, pero el relato era de San Lucas. Este año, la descripción del hecho corresponde a San Mateo.

En estos tiempos, es difícil imaginarnos la intensidad de este momento, especialmente cuando tenemos tanto CGI y efectos especiales en las películas de Hollywood que prácticamente ya no nos impresionan. Para poder tener todo en orden, hay que ponerlo en contexto:

“Jesús tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan, el hermano de éste, y los hizo subir a solas con Él a un monte elevado. Ahí se transfiguró en su presencia: su rostro se puso resplandeciente como el sol, y sus ropas se volvieron blancas como la nieve”.

Aquí, hablamos de un evento sobrenatural, en el cual se desafían todas las leyes naturales.

La resplandecencia nos habla de energía, la revelación de lo que en realidad somos y en Jesús lo cofirmamos.  Además, se abre un portal para dar paso a otros dos personajes muy importantes:

“De pronto aparecieron ante ellos Moisés y Elías, conversando con Jesús”.

Moisés representa la Ley, y Elías es el Profeta más importante para el pueblo Judío; así pues, los dos vienen a reafirmar la autoridad de Jesús, como diciendo que ellos, dos de las más importantes personas de la religión están a la par de Jesús.

¿Recuerdas una serie llamada Quantum Leap en la que el protagonista pasaba de un evento en la historia a otro y en el proceso se transfiguraba? Checa el GIF animado que nos da una idea del este importante evento.

El relato termina así:

“Una nube luminosa los cubrió. y de ella salió una voz que decía: Este es mi Hijo, muy amado, en quien tengo puestas mi complacencias; escúchenlo”.

 

Checa el siguiente video (desafortunadamente, el efecto no es tan impresionante).

Lecturas del Domingo: Octubre 16, 2016 – El Poder de la Oración

La viuda y el juez
La Viuda y el Juez por Anonymous artists from New York hired by Pacific Press Publishing Company expressly to illustrate this book (page 8) – Christ’s Object Lessons by Ellen Gould Harmon White, page 167 https://archive.org/details/christsobjectles00whitrich, Public Domain, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=50789840

Hoy conoceremos el poder de la oración y el sacrificio a Dios. Enla primera lectura escuchamos cómo los Israelitas están a punto de enfrentarse al gran ejército amalecita, el cual en ese tiempo era considerado el más poderoso del mundo.

Pero todo está desproporcionado, por 5 mil amalecitas hay un Israelita, así que es bien fácil pensar que cualquiera se hubiera dado por vencido rápidamente.

¿No es lo mismo que nos pasa a nosotros?, ¿Qué sucede cuando nos dicen que ese mal que tenemos casi no tiene probabilidades para desaparecer?, ¿Qué hacemos cuando estamos a punto de perder el trabajo y las posibilidades de encontrar otro son mínimas?

Pues bien, los Israelitas –y nosotros– tienen a Moisés, quien le dice a Josué que tome a su ejército y vaya a enfrentar al enemigo. Él, por su parte, se irá a un monte a orar a Dios por la victoria.

Mientras Josué peleaba, Moisés oraba y mantenia en alto los brazos, lo que hacie que Israel dominara. Cada vez que Mosiés bajaba los brazos –obviamente por cansancio– los amalecitas dominaban la batalla.

Aarón y Jur estaban con Moisés, entre los dos lo ayudaron a mantener los brazos arriba, aunque estuviera muriéndose del dolor, los calambres, y el esfuerzo. Así, Josué pudo terminar la batalla… y acabó con los amalecitas.

Así debe ser tu oración: sin desfallecer. Cuando enfrentes al enemigo, a la enfermedad, a la injusticia, tu arma es la oración, pero también NO debes renunciar al apoyo de otros, pues en nuestra condición humana, sómos débiles y necesitamos a los demás.

Ora, ora, ora. Y la respuesta te llegará. No deseches el apoyo de otros: familia, congregación, la medicina, los doctores, etc. Todos son parte de la misma respuesta.

El Juez Malo

Y para terminar, Jesús nos recuerda cómo la oración insistente produce resultados. La parábola del juez injusto nos presenta a un malvado juez, “que no teme a Dios ni a los hombres”. Esta descripción la usa Jesús para darnos a entender que el tipo es un verdadero malo.

Una viuda le ruega todos los dias que le haga justicia (no sabemos porqué, sólo sabemos que le está yendo mal y que clama por ayuda). En esos tiempos, las viudas son despreciadas por la sociedad. En verdad son ceros a la izquierda, pues no pueden votar, ni tienen peso político. Muchas veces son dejadas a su suerte, sin comida ni sustento y la mayoría que no tiene familia simplemente morían.

Jesús nos pone los elementos más extremos: el juez malo pero poderos, y la viuda impotente, que no tiene otro recurso mas que insistirle, insistirle, e insistirle por justicia.

Otra vez tenemos: ¡oración, oración, y oración!

El hombre, harto ya de tanto ruego de la pobre viuda, decide hacerle justicia, no porque se le haya ablandado el corazón, ¡Sino para que ya lo deje en paz!

Y termina diciendo nuestro Señor:

“Si así pensaba el juez injusto, ¿creen ustedes acaso que Dios no hará justicia a sus elegidos, que claman a Él día y noche, y que los hará esperar? Yo les digo que les hará justicia sin tardar.”

Lecturas del Domingo: Febrero 21, 2016 – La Transfiguración

La transfiguración de Jesús
By Alexander Andreyevich Ivanovhttp://nnm.ru/blogs/hhnu/ivanov_aleksandr_andreevich_1806_1858/, Public Domain, https://commons.wikimedia.org/w/index.php?curid=9086637

El de hoy es un evento bien padre: la transfiguración de Jesús. En resumen, Jesús lleva a Pedro, Santiago y Juan a lo alto de un monte. Allí, el grupo –excepto Jesús– cayeron rendidos de cansancio. En ese momento Jesús cambió de aspecto y las ropas se le pusieron blancas, resplandeciéntes, y relampaguiantes. Pedro alcanza a ver a otras dos personas, Elías y Moisés, e inocentemente le dice a su Señor que hagan tres chozas ahí. Finalmente, de entre un nuberío que se forma encima de ellos, se escucha una voz que dice “Este es mi Hijo, mi escogido, escúchenlo”.

¿Qué significa todo esto? Primero, estamos hablando de una epifanía, un evento sobrenatural de manifestación de Dios. Segundo, Jesús se empieza a mostrar en su calidad de Hijo de Dios, no sólo como hombre normal. Al iluminarse sus ropas intensamente y cambiar su aspecto, estamos hablando de un evento fuera de lo normal.

Tercero, se aparecen Elías y Moisés conversando con Jesús. Ellos dos representan lo mas importante del pueblo judío en ese entonces: Elías, el mayor de los profetas, y Moisés, representante de la Ley. Recuerda que la Ley es el libro que rige las vidas de los judíos. Al mencionar a estos dos personajes, Jesús demuestra que se habla del tú por tú con ellos, asentando su autoridad.

Cuarto, la humanidad esta presente: Pedro dice inocentemente: “Maestro, sería bueno que nos quedáramos aquí y que hiciéramos tres chozas”. Con esta sugerencia, Pedro insinua algo como todos estamos muy cómodos, no es necesario que bajemos llevando esta noticia o bendición a los demas. ¡Ay, lo humanos que quieren todo para ellos solitos!

Y, finalmente, la voz de Dios que sale de entre las nubes para volver a reivindicar a Jesús en su posición de Hijo de Dios.

Este evento es relatado de manera similar, con más y menos detalles, y confirmado en tres de los cuatro evangelios. Juan, uno de los testigos, no lo narra, pero el tiempo dará la verdadera razón más adelante, cuando Juan experimentará otra epifanía de mayor grado cuando narre El Apocalipsis.

Nacieron de puro milagro

¿Qué tJesus180x300ienen en común Jesús, Isaac, Moisés y Juan el Bautista? ¡Qué nacieron por sucesos milagrosos!

  • Jesús, a través de la inmaculada concepción, nació de Santa María, vírgen.
  • Isaac, el hijo de nuestro Padre Abraham, nació de Sara, su madre, cuando ella ya pasaba de los ochenta años y era una “vieja estéril“.
  • Moisés, aunque su nacimiento no fue completamente milagroso, recién nacido fue puesto en una canasta y dejado en el rio, donde la hija del Faraón lo encontró y adoptó.
  • Juan el Bautista, hijo de Isabel, la prima de nuestra Señora María. Isabel también de una mujer vieja y estéril, que cuando fue visitada por la madre de Jesús sintió a su niño saltando en su vientre.

Y, ¿qué tiene que ver que hayan tenido nacimientos fuera de lo normal? Pues para que no haya ninguna duda de que sus vidas están marcadas desde sus nacimientos por sucesos milagrosos, y que no se trata de personajes triviales. ¡Ajá!, ¡A que no te la sabías!